El creciente desarrollo de la industria automovilística genera una gran cantidad de neumáticos usados, que no pueden depositarse en vertederos, y el nivel de reutilización de las materias primas utilizadas en la producción de vehículos debe alcanzar al menos el 95%. El poder calorífico de los neumáticos usados es muy elevado y pueden considerarse portadores de energía, por ejemplo en forma de carbón generado durante el proceso de pirólisis. El artículo presenta los resultados del análisis químico de las muestras de carbón y los parámetros que son cruciales desde el punto de vista medioambiental y del proceso de sinterización del mineral de hierro. Los resultados muestran que las muestras de carbón con alto contenido en carbono, bajo contenido en azufre, zinc y aceite de pirólisis pueden utilizarse en el proceso de sinterización del mineral de hierro.
INTRODUCCIÓN
El desarrollo económico y, por ende, el desarrollo de la automoción aumentan la generación de residuos de caucho. Los neumáticos de automóvil representan aproximadamente el 80% de todos los residuos de caucho recogidos [1]. Cada año se producen en el mundo casi 1.400 millones de neumáticos [2, 3].
Los neumáticos de coche tienen una estructura compleja y para su producción se utilizan muchos materiales, sobre todo: caucho natural (NR), caucho butadieno (BR) y caucho estireno-butadieno (SBR). La composición morfológica de los neumáticos de coche es la siguiente: caucho (40-50 %), hollín (20-25 %), pequeña cantidad de elementos de construcción (acero, fibras) y aditivos (estabilizantes, antioxidantes) [4].
Dado que los vertederos en Europa se están expandiendo y que se considera que los neumáticos de coche son muy perjudiciales para el medio ambiente, la Unión Europea introdujo varios actos legislativos que, entre otras cosas, prohibían el vertido de neumáticos y sus elementos [5] y obligaban a reutilizar al menos el 95% de las materias primas utilizadas en la producción de vehículos [6].
En la actualidad existen varias formas de gestionar los neumáticos usados: recauchutado, reciclado de materiales o valorización energética. Sin embargo, la cantidad de neumáticos de desecho aumenta constantemente, por lo que deben desarrollarse nuevos métodos para su utilización. El poder calorífico de los neumáticos usados es muy alto (31-32 MJ/kg), por lo que se consideran un atractivo vector energético [7].
El artículo presenta los resultados de la posibilidad de utilizar carbón procedente de neumáticos de coche usados generado en un proceso de pirólisis como fuente de combustible alternativo en el proceso de sinterización del mineral de hierro.
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