Este artículo realiza un análisis y contraste crítico entre dos de los conflictos más significativos en materia de gestión de aguas en España, los casos de Yesa y Matarraña, con el objetivo de identificar las claves de lo que debería ser un proceso participativo de diálogo social en la resolución de conflictos de aguas, y con el interés de caracterizar la calidad de tales procesos y soluciones desde diferentes baremos de gobernabilidad. Para ello, se ha aplicado una metodología de análisis histórico institucional y de análisis de políticas públicas, que da cuenta de que, estos casos, aunque con una génesis y evolución marcada por líneas de fuerza, contradicciones y ritmos similares, presentan los casos extremos del abanico en cuanto a sus procesos de resolución.
INTRODUCCIÓN
Durante las dos últimas décadas surgieron en Aragón (España) importantes conflictos vinculados a la construcción de grandes presas, justificadas como regulaciones necesarias para transformar nuevos regadíos. Las tradicionales concepciones, prioridades y valores dominantes en materia hidráulica, heredados del Regeneracionismo1 de finales del siglo XIX, se ven hoy confrontados con nuevos enfoques y estrategias de la Nueva Cultura del Agua (NCA)2.
Entre los conflictos generados se destacan dos como emblemáticos, los conflictos de Yesa y Matarraña, que dieron origen al nuevo movimiento por la Nueva Cultura del Agua en la cuenca del Ebro a lo largo de la década de los 90, y en ellos también se crearon nuevos procesos de resolución. El conflicto del río Matarraña suscitó una dura confrontación entre los pueblos de la cuenca, la cual dio paso a una fase diferente en la gestión del conflicto, mediante una dinámica de diálogo con intermediación social que culminaría en los Acuerdos de Fabara, firmados en el Dictamen del Matarraña en la Comisión del Agua3 (Aranda, 2007), de las Cortes de Aragón. Estas dinámicas, a nivel de las comarcas, no solo permitieron superar el agudo conflicto en materia de gestión de aguas, sino que además abrieron un proceso de integración y de colaboración a nivel de las comarcas, considerado como buen ejemplo de gobernanza participativa, entendida ésta como un modelo de gobernanza abierto a la “participación ciudadana proactiva”.
Este trabajo contrasta este ejemplo positivo de gobernanza en el tratamiento de conflictos sociales con el caso de Yesa, en el que fue imposible llegar a acuerdos, frustrándose la iniciativa social de la mediación. Las presiones e intereses ajenos al territorio de los actores sociales en conflicto y la falta de voluntad política desde las esferas gubernamentales desincentivaron cualquier dinámica de diálogo y negociación social. Este contraste crítico se realiza con el objetivo de caracterizar la calidad de tales procesos y soluciones desde diferentes baremos de gobernabilidad.
Esta es una versión de prueba de citación de documentos de la Biblioteca Virtual Pro. Puede contener errores. Lo invitamos a consultar los manuales de citación de las respectivas fuentes.
Artículo:
Análisis y predicción basada en modelos de la influencia estacional y de las mareas sobre la distribución de contaminantes de desagües urbanos del río Ganges, India.
Artículo:
Ecología industrial : una tendencia que se está construyendo... muy lentamente
Tesis:
Crecimiento industrial y emisiones en países emergentes : descomposición de las emisiones de CO2 industriales a partir de la combustión de combustibles
Artículo:
Villatina: Algunas reflexiones 20 años después de la tragedia
Artículo:
Caracterización florística y estructural de la vegetación vascular en áreas con diferente condición de abandono en la cantera soratama, localidad de Usaquén, Bogotá