A pesar de algunas mejoras en el último Ejercicio Han Kuang 31, Taiwán sigue teniendo varias dificultades para lograr la credibilidad de su disuasión contra China.
Pasos hacia la realidad
Desde 1984, la serie anual de ejercicios Han Kuang ha sido un indicador del amplio esfuerzo de Taipei en operaciones conjuntas para varios escenarios de la defensa de la isla [1]. Esta serie de ejercicios a veces fue criticada por ser una mera muestra de potencia de fuego debido a la falta de realidad, pero varias características del ejercicio de este año significan cambios importantes [2].
En primer lugar, la integración más completa entre los sectores militar y civil refleja la naturaleza real de la defensa de los pequeños estados. Al ser una pequeña isla (unos 36000 km2) con un estrecho de 120 a 180 km de distancia de la segunda potencia militar más fuerte del mundo, las amenazas de esta última sobre la primera son más que militares, y los esfuerzos globales de la primera son necesarios para su supervivencia. Con una serie de sistemas de armas de largo alcance, el Ejército Popular de Liberación (EPL) puede proyectar eficazmente su potencia de fuego sobre Taiwán, y no habría una frontera clara entre el frente y la zona segura. Como resultado, todos los departamentos gubernamentales tienen que hacer frente a la guerra. Además, desde las crisis del Estrecho de Taiwán en 1996 y 1999, Beijing creó una nueva estrategia de "tres tipos de guerra": la guerra psicológica, la guerra legal y la guerra de la opinión pública contra Taipei, la primera tiene una serie de herramientas para hacer sinergia con la segunda [3]. Además, debido a la serie de políticas abiertas de Taiwán a China desde 2008, hay varios canales, entre ellos el turismo, la educación, los negocios y el matrimonio, para que los chinos visiten e incluso residan en Taiwán, y así es posible la penetración de varias fuerzas de operaciones especiales. Un conflicto armado a través del Estrecho podría ser una campaña sintética más que una batalla militar convencional. Antes de este año, los ejercicios de Han Kuang se concentraban en la esfera militar, pero todos los departamentos gubernamentales civiles relacionados, como el ministerio de asuntos exteriores y la espalda central, están incluidos en el juego de guerra del Han Kuang 31. Además de la asistencia, se practicaron algunas medidas de emergencia como la reasignación de los presupuestos y las reservas de divisas para la defensa, el fortalecimiento de la defensa de las instalaciones clave para evitar el sabotaje. Medios irregulares, como el ciberataque, también se enumeran en el escenario [4]. Es innegable que el grado de integración entre los departamentos gubernamentales durante el ejercicio es incierto para el público, tal vez con un margen considerable para mejorar, pero al menos revela cambios específicos en la mente de los planificadores de defensa.
En segundo lugar, algunas unidades cruciales se desplegaron de forma realista en posiciones tácticas. Debido a las amenazas de los misiles balísticos y de crucero chinos, así como al sabotaje, los cazas de Taiwán podrían no estar disponibles para la defensa aérea y los misiles tierra-aire (SAM) serían estratégicamente cruciales para negar la superioridad aérea establecida por China.
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