El principal objetivo de la gestión de residuos debe ser la recuperación de materias primas valiosas y, en consecuencia, la protección del entorno natural mediante la reducción del consumo de yacimientos y energía. La industria metalúrgica genera cantidades considerables de residuos que contienen hierro. Este artículo aborda soluciones respetuosas con el medio ambiente para la utilización de dichos residuos en forma de lodos, fangos y polvo. Lo que se discute es el impacto de las tecnologías propuestas en el entorno natural.
INTRODUCCIÓN
Las sustancias denominadas residuos están sujetas a una rigurosa normativa legal cuya finalidad es proteger la salud humana y el entorno natural. Restringir la generación de residuos es el principio más fundamental del uso racional de los recursos naturales y antropogénicos, mientras que el principal objetivo de la utilización de residuos es la recuperación de componentes valiosos (por ejemplo, energía o metal). A la hora de elegir la tecnología de aprovechamiento de residuos, no sólo se tienen en cuenta los aspectos económicos, sino también los de protección del medio ambiente.
Junto a la minería y la ingeniería energética, la industria metalúrgica genera grandes cantidades de residuos. De acuerdo con la normativa legal vigente, el propietario de los residuos está obligado, en primer lugar, a evitar la generación de residuos y, en segundo lugar, a reciclar o neutralizar los residuos cuya generación no haya podido evitarse con éxito.
RESIDUOS METALÚRGICOS FERROSOS
La industria metalúrgica es una de las mayores fuentes de residuos tales como lodos, fangos y polvos procedentes de los procesos de depuración de gases residuales llevados a cabo en plantas de sinterización, altos hornos y acerías, que incluyen tanto convertidores como hornos eléctricos, sistemas de refrigeración de la maquinaria que funciona a altas temperaturas, así como trenes de laminación. Los principios generales de gestión de estos residuos se han establecido en la Directiva 75/442/CEE del Consejo relativa a los residuos, modificada por la Directiva 91/156/CEE del Consejo. Los requisitos relativos a los residuos peligrosos son objeto de una normativa independiente. Este tema se contempla en la Directiva 94/31/CE del Consejo, que define la forma de manipular los residuos peligrosos. En la Decisión 94/904/CEE del Consejo se publicó una lista de estos tipos de residuos, denominada oficialmente Lista de Residuos Peligrosos.
Los lodos y residuos producidos durante la fabricación y transformación del hierro y el acero pueden dividirse en los siguientes grupos [1,2]
- Lodos ferrosos puros con un contenido de hierro superior al 60 % en peso,
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