En la telemedicina, al transferir imágenes médicas, pueden introducirse alteraciones. Antes de tomar decisiones diagnósticas, se debe verificar la integridad de la región de interés (ROI) de la imagen médica recibida para evitar diagnósticos erróneos. En este artículo, proponemos una novedosa técnica de marca de agua basada en bloques frágiles para imágenes médicas con el fin de evitar distorsiones de incrustación dentro de la ROI, verificar la integridad de la ROI, detectar con precisión los bloques manipulados dentro de la ROI y recuperar la ROI original sin pérdidas. En este método propuesto, la imagen médica se segmenta en tres conjuntos de píxeles: píxeles de la ROI, píxeles de la región de no interés (RONI) y píxeles de borde. Luego, se incrustan datos de autenticación e información de la ROI en los píxeles de borde. Los datos de recuperación de la ROI se incrustan en la RONI. Los resultados de experimentos realizados en varias imágenes
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