Este trabajo describe la preparación y caracterización del híbrido celulosa/fosfato de niobio hidratado con celulosa blanqueada procedente del bagazo de la caña de azúcar. El híbrido se preparó de dos formas diferentes: denominadas métodos I y II. El método I consistió en disolver niobio metálico en una mezcla fluorhídrica/nítrica (100:10), con un tiempo de envejecimiento de 16 horas en el que el bagazo de caña de azúcar estuvo en contacto con la solución ácida. A continuación, se añadió ácido fosfórico a la solución para la precipitación del material. El método II fue similar, pero el niobio metálico se diluyó en una solución fluorhídrica/nítrica (160/100) sin tiempo de envejecimiento. En ambos métodos se utilizaron diferentes proporciones de Cel/NbOPO4.nH2O: (10:10); (10:6) y (10:2). Estos materiales se caracterizaron mediante difracción de rayos X (DRX), análisis por termogravimetría (TG/DTG) y microscopía electrónica de barrido (SEM). Se observó la deposición de fosfato de niobio y un aumento de la cristalinidad.}
INTRODUCCIÓN
El estudio de los residuos agrícolas y su potencial como materia prima para diversos usos está en auge, principalmente debido a la necesidad de encontrar materiales sostenibles y económicamente viables. Entre estos materiales, el bagazo de caña de azúcar ha sido objeto de numerosas investigaciones debido a su abundancia y composición química favorable.
La caña de azúcar (Saccharum officinarum, L.) es una planta ampliamente cultivada en regiones tropicales y subtropicales, conocida por su capacidad para producir tallos ricos en sacarosa, que se utiliza principalmente para la producción de azúcar y alcohol. El proceso de industrialización de la caña de azúcar genera varios subproductos, siendo el bagazo uno de los más relevantes.
Desde el punto de vista morfológico, el bagazo de caña de azúcar está compuesto por aproximadamente un 50% de fibras, un 30% de parénquima, un 15% de vasos y un 5% de epidermis. Su composición química varía dependiendo de varios factores, como el tipo de caña y el suelo, pero típicamente contiene celulosa (40-48%), hemicelulosa (25%), lignina (20%), y otros componentes como extractivos, proteínas, almidón, ceras y grasas.
En la investigación actual, se exploran diversas aplicaciones del bagazo de caña de azúcar, incluyendo la producción de materiales compuestos avanzados como nanocompuestos de fibras de celulosa. Por ejemplo, estudios como el realizado por Marques et al. han demostrado que las fibras de celulosa recubiertas con dióxido de titanio pueden servir como refuerzo en matrices poliméricas, mejorando sus propiedades mecánicas y funcionales.
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