La necesidad de nuevas técnicas en cardiología ha impulsado la Ingeniería Tisular hacia el desarrollo de vasos sanguíneos artificiales que cumplan los requerimientos del organismo. En este trabajo se fabricaron estructuras tubulares de celulosa bacteriana (BC) y se evaluó su degradación in vitro. No se observaron cambios significativos en la microestructura y la morfología de las fibras de BC mediante microscopía electrónica de barrido tras los ensayos de degradación. Los ensayos de degradación en soluciones fisiológicas (PBS y solución salina) revelaron una degradación sustancialmente baja después de 20 semanas. Una baja tasa de degradación de los vasos artificiales es importante, ya que el proceso de formación de nuevos vasos sanguíneos (angiogénesis) requiere tiempo.
INTRODUCCIÓN
Las cardiopatías son una de las principales causas de muerte en todo el mundo cada año. Patologías como la aterosclerosis, los aneurismas y las varices llevan a miles de pacientes a someterse a intervenciones quirúrgicas para reparar o reemplazar vasos sanguíneos dañados. Esta intervención es esencial para mantener la vida, ya que restablece el flujo sanguíneo ininterrumpido, responsable del transporte y distribución de factores esenciales para el metabolismo . Debido a las elevadas tasas de mortalidad por cardiopatías, numerosos estudios en Ingeniería de Tejidos se enfocan en el desarrollo de vasos artificiales . Estos vasos podrían reemplazar los vasos sanguíneos sin necesidad de extraer segmentos de otros vasos del cuerpo del paciente, como se hace en los injertos de derivación aortocoronaria donde se utiliza la vena safena para mejorar el flujo sanguíneo en las arterias coronarias obstruidas .
La celulosa bacteriana (CB) ha demostrado ser un biomaterial con un gran potencial para su uso en medicina regenerativa y otras aplicaciones de ingeniería de tejidos. Sus propiedades, como alta cristalinidad, quiralidad, resistencia mecánica, porosidad, biocompatibilidad, atoxicidad y biodegradabilidad, hacen de la CB un material ideal para estas aplicaciones . Debido a estas propiedades, la CB se está utilizando en la investigación para la regeneración de cartílago, la creación de vasos artificiales y la ingeniería de tejidos óseos . Algunos investigadores han utilizado celulosa bacteriana como biomaterial base en la construcción de vasos sanguíneos artificiales, destacando su potencial en esta área. Para cualquier biomaterial que se vaya a implantar en pruebas in vivo, es crucial conocer su origen y composición para evitar daños al organismo. Con este fin, se han realizado estudios de caracterización fisicoquímica y de biocompatibilidad con tejidos vivos e in vitro.
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