La placa dental es un ambiente complejo que mantiene un equilibrio con determinadas comunidades microbianas; sin embargo, este microhábitat puede ser perturbado por algunas especies endógenas causando enfermedad. Se realizó una revisión sistemática exploratoria empleando las bases de datos Pubmed, Scopus, Lilacs y Science Direct y se identificó que los compuestos timol, mentol y eucaliptol presentan actividad antimicrobiana variable, discordancias intra e inter-especie y una intensidad antimicrobiana fuerte sobre Aggregatibacter actinomycetemcomitans, Candida albicans, Candida dubliniensis, Enterococcus faecalis, Escherichia coli, Lactobacillus plantarum and Streptococcus mutans; indicando que estos fitoquímicos pueden ser consideradas como sustancias antimicrobianas de amplio espectro, con efecto sobre microorganismos relacionados con enfermedades bucales.
Introducción
La cavidad bucal es un entorno complejo y dinámico que alberga una gran variedad de microorganismos que cohabitan de forma beneficiosa con el huésped; sin embargo, algunas especies endógenas causan enfermedades cuando los cambios ambientales interfieren en el equilibrio homeostático de este microhábitat [1]. Para evitar la progresión de estas enfermedades, se han propuesto programas de promoción de la salud y políticas de prevención de las enfermedades orales a nivel mundial y nacional, que incluyen la regulación de los alimentos, los programas tradicionales de atención dental y el uso de productos coadyuvantes [2, 3]. Sin embargo, debido a la complejidad biológica y la estructura de la placa dental [4], ha sido necesario realizar investigaciones para identificar sustancias eficaces que no alteren la biología de la mucosa oral [5].
Como resultado de estas iniciativas, se ha reconocido que las plantas medicinales y sus subproductos pueden contribuir al mantenimiento de la salud humana, con un creciente interés en los últimos años en la identificación de la actividad biológica, como el efecto antimicrobiano [6-9]. Algunas de estas sustancias naturales alteran el funcionamiento regular de las células microbianas, ya sea a nivel de las membranas, de las interacciones moleculares como la fuerza motriz de protones, el flujo de electrones y las bombas de eflujo, o de la actividad enzimática de algunas proteínas como las deshidrogenasas, afectando a la síntesis de ATP [6, 10] entre otros procesos. Estos efectos han sido evaluados y reportados por diferentes técnicas, incluyendo las diluciones y la difusión en agar [11], las cuales son elegidas de acuerdo a la naturaleza o polaridad de la sustancia de interés [11, 12].
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Tesis:
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Artículo:
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