Evaluación ambiental para la producción primaria de leche orgánica en hatos del municipio de Arjona, departamento de Bolívar, Colombia

Environmental assessment for the primary production of organic milk in ranches in the municipality of Arjona, department of Bolivar, Colombia

La producción orgánica de leche bovina tiene potencial para incrementar la base exportadora y el mercado interno colombiano, considerando la demanda mundial creciente de este tipo de productos y la necesidad de conservar el ambiente. Por eso, este estudio de caso propone directrices prácticas para el mejoramiento de los procesos productivos del sector ganadero en la zona norte del departamento de Bolívar, a partir de los resultados del diagnóstico ambiental de la producción primaria de leche de bovinos, a través de la evaluación de las condiciones de 63 hatos del municipio de Arjona, Bolívar.

INTRODUCCIÓN

Con una producción anual de 6617 millones de litros de leche, Colombia ocupa el cuarto lugar en América Latina, después de Brasil, México y Argentina (Portal lechero, 2014; Fedegan, 2014).

En la región Caribe colombiana los departamentos de mayor importancia en este sector son, en orden decreciente, Cesar, Magdalena, Córdoba, Atlántico, Guajira, Sucre y Bolívar. En ellos, aun cuando la producción láctea es un subsector de peso en la industria alimenticia nacional, la mayoría de los proveedores son pequeños productores y microempresarios (230.000 predios) (Fedegán, 2010a), los cuales deben hacer grandes esfuerzos para mejorar sus procesos productivos y así hacer frente a un mercado nacional e internacional cada vez más competitivo y exigente en cuestión de calidad de los productos. Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) (2010), solamente el departamento del Atlántico está en el grupo escalafonado como de competitividad alta; Bolívar está en el nivel medio bajo y Cesar, Sucre, Córdoba y Magdalena muestran un bajo desempeño competitivo, y el más rezagado en la región es La Guajira.

A pesar de las cifras antes anotadas, el sector agropecuario nacional es dinámico pero con grandes limitaciones para elevar su productividad y ser competitivo a escala global (Gil, 2008), posiblemente por la carencia de unas políticas que lo encaminen hacia un desarrollo en el marco de la sostenibilidad económica y ambiental. No obstante, las condiciones del mercado mundial son una gran oportunidad para participar en la satisfacción de la demanda del 50 % adicional de una población mundial creciente y así poder disminuir el alto nivel de pobreza (64,3 %) que lo aqueja (Lafaurie, 2010a) y nivelar el desbalance entre las importaciones crecientes y las exportaciones de productos lácteos. En Colombia estas últimas vienen cayendo desde hace varios años (Salcedo, 2012), y ello exige la adopción de procesos más limpios, a fin de eliminar los obstáculos que esta deficiencia impone al ingreso en esos nuevos mercados potenciales de los productos de la ganadería colombiana (Gil, 2008; Mahecha et ál., 2002).