Distribución espacial y temporal de aprovechamientos de agua del acuífero del Valle de Tecamachalco, Puebla
Spatial and Temporal Distribution of the Water Exploitation in the Aquifer Valle de Tecamachalco, Puebla
La presente investigación se realizó con el propósito de analizar la distribución geoespacial de los aprovechamientos de agua del Acuífero del Valle de Tecamachalco Puebla, México, a fin de identificar zonas de mayor densidad de aprovechamientos hídricos e intensidad del uso del agua. A partir de datos del Registro Público de Derechos de Agua de la Comisión Nacional del Agua, de 1994 a 2014 se obtuvieron 1286 aprovechamientos, con un volumen concesionado de 194 223 870.9 metros cúbicos anuales. El análisis espacial mediante el cálculo de la densidad tipo Kernel permitió determinar la probabilidad de ocurrencia y localización en el espacio de los aprovechamientos hídricos o pozos profundos, además de su diferenciación geográfica en el acuífero en función de su distribución. Con este método se generaron mapas de tipo isoplético, que representan conjuntos de puntos en el espacio. Conforme los resultados, se encontró que predominan, en un 78%, los pozos de uso agrícola; seguido por los de uso público-urbano, con un 16,7%. El patrón de distribución muestra que las áreas de mayor densidad de pozos profundos se ubican en los municipios de Palmar de Bravo y Quecholac, e indica las zonas de mayor extracción.
INTRODUCCIÓN
Actualmente, tanto la actividad económica como el desarrollo social en muchas regiones del mundo, se ven limitadas por la disponibilidad de agua. Dado que esta se utiliza de manera directa o indirecta en cualquier proceso o actividad humana, se hace evidente una mayor competencia entre los usuarios y una baja disponibilidad de este vital recurso, problemática cuyo origen no solo se debe a su escasez, sino también a su mal manejo. Dicha situación se convierte en un desafío mundial (Guzmán-Soria et al., 2009; Llamas, Aldaya, Garrido, & López-Gunn, 2009; Barrionuevo & Feler, 2014).
La sobreexplotación del vital líquido en un territorio, ante su creciente demanda, ha disminuido la disponibilidad del recurso más allá de la capacidad de recarga de los sistemas hídricos, lo que ha afectado a especies animales y vegetales ante las transformaciones de los ecosistemas, y ha causado daños irreversibles en los mismos (Instituto Nacional de Ecología [INE], 2005). En consecuencia, se genera una lucha por el recurso, que presenta un estrés hídrico; es decir, su disponibilidad es cada vez menor y más vulnerable, lo que pone en riesgo la vida en el planeta.
En México, la disponibilidad media de agua por habitante ha ido disminuyendo. En 1950, se contaba con 18 035 m3; para el año 2000, fue de 4900 m3; en el 2004, de 4547 m3; en el 2010, de 4090 m3; en el 2013, de 3982 m3; y se estima que para el 2025, descienda hasta 3822 m3/hab/año (Carabias, Collado, Martínez, & Landa, 2005; Comisión Nacional del Agua [Conagua], 2014b). La recarga media de los acuíferos es de 77 km3, y se estima un aprovechamiento de 27,4 km3/año.
Recursos
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Formatopdf
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Idioma:español
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Tamaño:1435 kb