El stock de capital industrial medido a través de la relación inversión-empleo: estimaciones para los estados mexicanos
Industrial capital stock measured through the investment-employment ratio: estimates for Mexican states
En este trabajo, proponemos medir el stock de capital para el sector industrial de los estados de México. El método que se usa, primero calcula la edad promedio del capital mediante una ecuación de regresión que relaciona datos de inversión y empleo y utiliza esta información para estimar el stock de capital. Los hallazgos empíricos sugieren la existencia de una significativa variación interregional en la edad del capital, que coincide con la existencia de sustanciales diferencias tecnológicas entre el conjunto de estados industrializados y los no (o menos) industrializados. El análisis de las tendencias regionales basadas en el stock de capital industrial indica una relación creciente de los cocientes capital-trabajo y una tasa de inversión relativamente estable; lo cual representa un resultado anticipado por la teoría económica.
INTRODUCCIÓN
En décadas recientes, la investigación económica ha sido realizada en gran medida a través de la creación, actualización y ampliación de bases de datos de importantes variables macroeconómicas. Uno de los campos en los cuales los esfuerzos han sido muy intensos y prometedores es en la estimación de las series macroeconómicas del stock de capital. Al respecto, las aplicaciones han sido dirigidas tanto a conjuntos de países como a áreas regionales dentro de un país.
Ejemplos de la primera clase, son: las estimaciones de stock de capital para un grupo amplio de países en las llamadas Penn World Tables de Summers y Heston [1988, 1991], la medición y consumo de capital fijo en países de la OECD [OECD, 2001] y una diversidad de trabajos que realizan aportaciones a países individuales, como las estimaciones para Dinamarca de Groes [1976], para Suecia en el trabajo de Tengblad y Westerlund [1976], para Alemania (República Federal) de Lützel [1977]. A los anteriores, le siguen los trabajos de Hahn y Schmoranz [1984] en Austria; Biorn, Holmoy y Olsen [1989] en Noruega; Hwang [1997] en industrias de Canadá; Williams [1998] en bienes durables del Reino Unido; además de estimaciones también muy recientes para el caso de España en Cubel y Palafox [1997 y 2002], entre otros. Ejemplos de la segunda clase, son: las estimaciones del stock de capital para las regiones de un país, realizadas en los trabajos de Varaiya y Wiseman [1981] para el sector manufacturero de las áreas metropolitanas de EE.UU.; Harris [1983] para las regiones del Reino Unido; Anderson y Rigby [1989] en las regiones de Canadá; Melachroinos y Spence [2000] en el sector manufacturero de las diferentes regiones de Grecia; Mas, Pérez y Uriel [2000] para provincias y regiones de España; etc.
En América Latina, ha habido algunos esfuerzos en el nivel interno de los países, como el trabajo de Harberger y Wisecarver [1977] para el caso de las cuentas nacionales de Uruguay y los trabajos de Hofman [1992 y 2000] para seis de las principales economías de América Latina. La estimación de la dimensión capital de cualquier economía surge como respuesta inmediata a una necesidad creciente por contar con cifras de stock de capital, sin las cuales un espectro amplio de la investigación económica empírica no podría ser llevado a cabo satisfactoriamente.
Recursos
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Formatopdf
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Idioma:español
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