Nos urge utilizar la ciencia para civilizar a la civilización
Jacques-Yves Cousteau fue un conocedor del mundo submarino, investigador, inventor, fotógrafo, cineasta y presentador de programas de televisión.
Fue el menor de dos hijos del matrimonio entre Elizabeth y Daniel Cousteau. Nació en Saint-André-de-Cubzac (Francia) el 11 de junio de 1910. A los cuatro años aprendió a nadar y ese fue el comienzo de su gran pasión por la vida en el agua.
Al entrar a la adolescencia, además, mostró cierta fascinación por los objetos mecánicos y su funcionamiento. Sin embargo, en la escuela no mostró los mejores resultados, por lo cual a los 13 años fue enviado a un internado en Alsacia, Francia.
Una vez terminó sus estudios preparatorios, asistió al Collège Stanislas en París, y posteriormente, en 1930 Cousteau ingresó a la Ecole Navale (Academia Naval Francesa) en Brest donde se graduó como oficial de artillería y se unió al servicio de información de la Marina francesa.
En 1933, mientras Cousteau se entrenaba para ser piloto, sufrió un accidente automovilístico que casi le cobra la vida, lo que hizo que se aparta completamente de su carrera como piloto. Durante su rehabilitación nadaba diariamente en las aguas del Mediterráneo. Poco después un amigo le regaló un par de gafas de natación, lo que para Jacques-Yves se convirtió en una revelación que partiría de manera impresionante su vida en dos partes. Esto hizo que finalmente toda su atención se enfocara en comprender los misterios submarinos.
En 1937 contrajo matrimonio con Simone Melchior con quien tuvo dos hijos: Jean-Michel y Phillipe. Cuando París cayó ante los nazis durante la Segunda Guerra Mundial, Jacques-Yves y su familia se refugiaron en una pequeña ciudad cerca de la frontera suiza en donde continuó con sus experimentos y exploraciones submarinas. En 1943 conoció a un ingeniero francés, Emile Gagnan, con quien desarrolló el aparato de respiración subacuática autónomo, lo que abrió las puertas del mundo submarino a los humanos ya que permite permanecer sumergido por largos periodos de tiempo de manera autónoma. Durante este tiempo también desarrolló una cámara impermeable que pudiera resistir las altas presiones de las aguas profundas.