Quien no lucha no vence
Laica, docente y ensayista, reconocida por haber fundado y dirigido el Movimiento de los Focolares en Italia. En la actualidad se encuentra en proceso de beatificación y canonización.
Chiara Lubich nació en Trento, Italia, el 22 de enero de 1920. Fue registrada con el nombre de Silvia. Era la segunda de cuatro hermanos hijos de Luigia Marinconz, quien era una católica practicante, y Luigi Lubich, un tipógrafo del diario L´Unità, socialista y antifascista comprometido. Debido a la situación política del país, la familia fue estigmatizada y sufrió grandes problemas económicos. Desde su juventud, Silvia participa en la Acción Católica. En 1938 recibió el diploma de maestra y empezó a trabajar en escuelas primarias. Se matriculó en la Universidad de Venecia, pero debió abandonar sus estudios debido al estallido de la Segunda
En 1942 decidió ingresar a la Tercera Orden Franciscana y cambió su nombre a Chiara, animada por el compromiso de santa Clara de Asís. En 1943 empezó sus estudios en la Universidad Ca´ Foscari de Venecia, mientras tanto, siguió dando clases particulares. El 7 de diciembre de 1943, asumió un voto de castidad y decidió consagrar su vida a Dios. Además, este día surgió el Movimiento de los Focolares. El 13 de mayo de 1944 su casa fue destruida por un bombardeo, su familia se desplazó a las montañas, pero Chiara se quedó en la ciudad y alquiló un apartamento donde albergó a otras compañeras con quienes vivieron el evangelio en plenitud. Denominaron el espacio residencial La casita y este se convirtió en el primer focolar.
En medio de la guerra, la comunidad compartió todo lo que tenía con los más necesitados. En 1947 varios trabajadores, religiosos y familias enteras se unieron al movimiento, llegando a ser más de 500 personas...