Impact of climate changes on the european industry

Impacto del cambio climático en la industria europea

Este documento ofrece una visión general de las consecuencias directas de los fenómenos meteorológicos graves y de las medidas de mitigación adoptadas al respecto por la Comisión de la Unión Europea (UE). Las posibles ramificaciones del cambio climático se han ilustrado a partir del ejemplo de la industria siderúrgica. En conjunto, las conclusiones de este estudio sugieren que los cambios climáticos representan una amenaza para la actividad industrial por la aparición de fenómenos meteorológicos extremos, así como por la necesidad de ajustar las operaciones para cumplir las restricciones y sanciones legales cada vez más estrictas relacionadas con la política medioambiental aplicada por la Unión Europea.

INTRODUCCIÓN

En esencia, las empresas de hoy en día funcionan en un entorno volátil y dinámico. Necesitan adaptarse constantemente a los cambios del mercado, a las normativas legales, a las normas de control, a las oportunidades de inversión, a la competencia y responder a otras muchas amenazas que afectan tanto a los procesos internos como al entorno externo de la empresa.

Una de las amenazas externas a las operaciones empresariales son los cambios climáticos. Debido a la mayor correlación entre el medio ambiente y las actividades humanas, tienen un impacto significativo tanto en la sociedad como en la economía [1]. Por lo tanto, el documento trata de mostrar el impacto de los cambios climáticos en la actividad industrial, ilustrada con el ejemplo de la industria siderúrgica. El estudio examina las implicaciones de los cambios climáticos y las acciones puestas en marcha por la Comisión de la UE para limitar el impacto de estos cambios. Para ello se ha recurrido a bibliografía de referencia y a información generada en bases de datos, incluida información sobre catástrofes naturales y tecnológicas.

CONSECUENCIAS DIRECTAS DE LOS FENÓMENOS CLIMÁTICOS GRAVES

Los cambios climáticos se refieren a fenómenos perjudiciales en las condiciones atmosféricas que causan diversas anomalías meteorológicas. De acuerdo con los datos y análisis estadísticos, existe una tendencia ascendente continuada en el número de fenómenos peligrosos a lo largo del año en todo el planeta [2,3]. Además, un número cada vez mayor de fenómenos va acompañado de un aumento de la intensidad de sus efectos (por ejemplo, inundaciones). El gran número de víctimas (sobre todo en 1997 y 2000, como consecuencia de las inundaciones en Austria, República Checa, Alemania, Eslovaquia, Polonia, Hungría, Rumanía y Croacia) y la magnitud de la destrucción ponen de manifiesto la gravedad de las amenazas que plantean los fenómenos meteorológicos extremos. Entre 2002 y 2011, los costes generados por las catástrofes naturales ascendieron a una media de 131 billones anuales [3].

En toda Europa, todas las naciones están expuestas a los cambios climáticos que se están produciendo, aunque en distintos grados. Según la Agencia Europea de Medio Ambiente, las olas de calor, las inundaciones y las tormentas son los fenómenos catastróficos más importantes [4].