La evaluación del aprendizaje como compromiso: una visión desde la pedagogía crítica
Learning assessment as engagement: a view from critical pedagogy
El principal propósito de este artículo es presentar una reflexión sobre la evaluación como parte consustancial de los espacios conceptuales educativos; esto se hace a partir de la teoría crítica. Se presenta una reconceptualización del proceso de evaluación, aportando elementos sobre su función y el modo en que se deba hacer. Inicialmente, se expone el sentido y papel de la educación, y desde allí se resignifica la evaluación desde el aporte que hace al reconocimiento del ser. En este orden de ideas, la evaluación se muestra no como un componente, ni una herramienta, ni como un apéndice de la educación, sino como algo consustancial a ella y que está ligada al aprendizaje. La evaluación, entonces, se hace presente desde el momento en que el individuo es consciente que aprende, de que él puede. Desde esta perspectiva, se hace necesario hablar en otros términos de la evaluación, abandonando la posición que la reduce a un sentido instrumental y técnico. En conclusión, se afirma que es posible transformar la educación desde la evaluación y, de este modo, la evaluación, bajo la visión de la pedagogía crítica, se convierte en un compromiso vigente y actuante.
INTRODUCCIÓN
La educación no es un artículo de lujo, o al menos, no debería serlo. Todas las personas deben tener acceso a la educación, y no a cualquier educación, sino a aquella que contribuya a desarrollar su humanidad, su comprensión del mundo y sus habilidades.
Hoy por hoy, buena parte de la educación cumple el papel de instrumento, de un recurso para alcanzar objetivos laborales, no necesariamente para lograr felicidad personal y social. La productividad aparece como el sentido primero y último del aprendizaje. Sin embargo, esta no se entiende en el sentido de creación, como una propuesta ante la pasividad en la que sólo se adopta una actitud consumista, sino se expresa como utilidad en sentido pragmático; es decir, que lo que es bueno lo es porque es útil. La pregunta que inmediatamente se presenta es quién determina esa utilidad y con qué sentido.
La educación entonces se mueve entre estar al servicio del ser humano para lograr su máxima expresión o ser un medio para preparar mano de obra. Este es el panorama de la educación propia de formas tradicionales de enseñanza. Esta perspectiva le asigna a la educación una finalidad asociada a la utilidad, en cuanto efectivamente es útil para reproducir la ideología dominante y promueve de manera soterrada la continuidad de una sociedad basada exclusivamente en el consumo como sentido de vida y de propiedad como sentido existencial.
Recursos
-
Formatopdf
-
Idioma:español
-
Tamaño:167 kb