Evaluación citotóxica en tres cepas de células tumorales de las fracciones obtenidas de la corteza del tallo de Salacia crassifolia (MART. ex. Schult.) G. Dom. (Celastraceae)

Assessment of cytotoxicity in three tumor cell lines of the fractions attained from the stem bark of Salacia crassifolia (Mart. ex. Schult.) G. Dom (Celastraceae)

El uso de las plantas por el hombre con fines medicinales es una de las formas más antiguas de tratamiento, cura y prevención de enfermedades, entre ellas el cáncer, cuyas especies vegetales se encuentran en una gran diversidad en el ecosistema. Con esta perspectiva, se eligió un arbusto típico del Cerrado, Salacia crassifolia (Celastraceae), para un examen inicial a fin de determinar el potencial citotóxico de esta especie in vitro. En la medicina popular, la S. crassifolia se utiliza en el tratamiento de problemas renales, tos crónica, dolores de cabeza, cicatrización, terapia de la malaria y ulcerogenia. Las fracciones: hidroalcohólica (SCCcM-W), diclorometánica (SCCcM-D), hexánica (SCCcM-H) y acetato de etilo (SCCcM-A) de la corteza del tallo fueron sometidas a pruebas de citotoxicidad in vitro contra las cepas MDA-MB-435 (melanoma), HCT-8 (colon humano) y SF-295 (sistema nervioso central) utilizando el método colorimétrico MTT. Las fracciones hexánica (SCCcM-H) y de acetato de etilo (SCCcM-A) fueron las que proporcionaron una citotoxicidad significativa contra las células tumorales analizadas.

Introducción

Durante siglos, las plantas se han utilizado como fuentes terapéuticas de ayuda al hombre en la lucha contra las enfermedades (1). El potencial antitumoral de los derivados de compuestos naturales ha presentado un interés creciente en los últimos años. En las dos últimas décadas, más del 25% de los fármacos utilizados proceden directamente de derivados vegetales, mientras que el otro 25% son productos naturales modificados químicamente (2).

La producción de numerosos fármacos contemporáneos se deriva de muchos metabolitos secundarios, que destacan por su alto poder de actividad microbiológica, bactericida, antifúngica y otras diversas. Así pues, la colaboración entre los químicos medicinales y los químicos de productos naturales desempeña un papel fundamental en el descubrimiento de estos nuevos metabolitos (3).

Entre los agentes quimioterapéuticos para el cáncer, la vimblastina y la vincristina (extraídas del Catharrantus roseus), el etopósido, el tenipósido y el taxol, en los últimos 20 años se han convertido en fármacos esenciales en la terapéutica, además del resurgimiento de su interés en las industrias farmacéuticas (4).