La gestión de residuos radiactivos requiere aislarlos y confinarlos durante períodos de tiempo que van desde el centenar de años, en el caso del almacenamiento temporal del combustible gastado (ATC), a los 300 años para los residuos de baja y media actividad y decenas de miles de años para el almacenamiento geológico a largo plazo.
La selección y verificación de materiales adecuados para la gestión no considera solo los distintos horizontes de tiempo indicados, sino que además debe considerar la respuesta frente a la irradiación, muy intensa en muchos casos, la emisión de calor y las distintas condiciones físicoquímicas derivadas tanto del diseño como de las características de los emplazamientos que podrán variar drásticamente.
Bajo estas premisas se viene trabajando con diversos materiales que incluyen materiales de base cemento, materiales metálicos y materiales de base arcilla, a los que habrá que añadir los de tipo vidrio.
A lo largo de la presentación se expone la situación alcanzada para cada uno de los materiales citados en base a las solicitaciones y requisitos que, como componentes del almacenamiento, se esperan de ellos. En ese sentido, se presentan los resultados más relevantes de las líneas de investigación españolas y europeas, considerando los procesos que tienen lugar tanto en escala del laboratorio convencional como a escala de laboratorios subterráneos o ensayos a escala 1:1, indicando para todos ellos los desarrollos numéricos que han sido necesarios como herramienta de investigación.
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