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Bioeficacia de la harina de trigo fortificada con hierro y zinc, junto con la bioevaluación de su potencial tóxico hepático y renal
Se planificó un estudio para evaluar la bioeficiencia y la toxicidad de la harina integral de trigo fortificada con hierro y zinc en ratas albinas Sprague Dawley. La harina integral se fortificó con diferentes dosis de EDTA de hierro y sodio (NaFeEDTA), sulfato ferroso (FeSO₄), óxido de zinc (ZnO) y sulfato de zinc (ZnSO₄). Las ratas (n=3) de cada grupo fueron alimentadas con harina de trigo fortificada durante dos meses. Se registraron biomarcadores hepáticos, como la fosfatasa alcalina (FA), la alanina transaminasa (ALT), la aspartato aminotransferasa (AST) y la bilirrubina, a partir de muestras de suero. El aumento de la concentración de ZnSO₄ afectó a los biomarcadores hepáticos, alcanzando los niveles más altos, mientras que los niveles de bilirrubina fueron menores que en las ratas alimentadas con la dieta control. Los fortificantes mencionados tienen un efecto insignificante sobre los biomarcadores renales, como la creatinina y la urea. Además, se revisaron los parámetros hematológicos y, según se informó, las ratas alimentadas con EDTA de hierro y sodio presentaron los mayores niveles de hemoglobina, hierro y capacidad total de fijación del hierro. El mayor nivel de zinc se observó en las ratas alimentadas con harina de trigo integral fortificada con 60 mg/kg de óxido de zinc. La observación microscópica del tejido hepático mostró que las ratas alimentadas con harina de trigo fortificada con hierro y zinc presentan mayores efectos tóxicos, mientras que la presentación histopatológica del tejido renal tiene un impacto menor. Se concluyó que la fortificación obligatoria de la harina de trigo con hierro y zinc puede causar un aumento de los biomarcadores séricos, junto con toxicidad en órganos vitales como el hígado; por lo tanto, se podría fortificar una fracción de la harina de trigo para satisfacer las necesidades de los grupos desfavorecidos y vulnerables.
Autores: Malika, S.; Ullah, A.; Anjum, A. A.; Sattar, M. M. K.; Ali, T.; Manzoor, R. ; Ben Ali, M.; Mustafa, S.; Kanwal, S.; Tahreem, S.
Idioma: Inglés
Editor: Takako Matsumura-Tundisi
Año: 2022
Categoría
Licencia
Consultas: 17
Citaciones: Sin citaciones
Este documento es un artículo elaborado por Malika, S., Ullah, A., Anjum, A. A., Sattar, M. M. K., Ali, T., y Manzoor, R. (Universidad del Punjab, Universidad de Ciencias Veterinarias y Animales y La Universidad Islamia de Bahawalpur, Pakistán) para Brazilian Journal of Biology Vol. 82. Publicación de Instituto Internacional de Ecología. Contacto: bjb@bjb.com.br
Se planificó un estudio para evaluar la bioeficiencia y la toxicidad de la harina integral de trigo fortificada con hierro y zinc en ratas albinas Sprague Dawley. La harina integral se fortificó con diferentes dosis de EDTA de hierro y sodio (NaFeEDTA), sulfato ferroso (FeSO₄), óxido de zinc (ZnO) y sulfato de zinc (ZnSO₄). Las ratas (n=3) de cada grupo fueron alimentadas con harina de trigo fortificada durante dos meses. Se registraron biomarcadores hepáticos, como la fosfatasa alcalina (FA), la alanina transaminasa (ALT), la aspartato aminotransferasa (AST) y la bilirrubina, a partir de muestras de suero. El aumento de la concentración de ZnSO₄ afectó a los biomarcadores hepáticos, alcanzando los niveles más altos, mientras que los niveles de bilirrubina fueron menores que en las ratas alimentadas con la dieta control. Los fortificantes mencionados tienen un efecto insignificante sobre los biomarcadores renales, como la creatinina y la urea. Además, se revisaron los parámetros hematológicos y, según se informó, las ratas alimentadas con EDTA de hierro y sodio presentaron los mayores niveles de hemoglobina, hierro y capacidad total de fijación del hierro. El mayor nivel de zinc se observó en las ratas alimentadas con harina de trigo integral fortificada con 60 mg/kg de óxido de zinc. La observación microscópica del tejido hepático mostró que las ratas alimentadas con harina de trigo fortificada con hierro y zinc presentan mayores efectos tóxicos, mientras que la presentación histopatológica del tejido renal tiene un impacto menor. Se concluyó que la fortificación obligatoria de la harina de trigo con hierro y zinc puede causar un aumento de los biomarcadores séricos, junto con toxicidad en órganos vitales como el hígado; por lo tanto, se podría fortificar una fracción de la harina de trigo para satisfacer las necesidades de los grupos desfavorecidos y vulnerables.
Se planificó un estudio para evaluar la bioeficiencia y la toxicidad de la harina integral de trigo fortificada con hierro y zinc en ratas albinas Sprague Dawley. La harina integral se fortificó con diferentes dosis de EDTA de hierro y sodio (NaFeEDTA), sulfato ferroso (FeSO₄), óxido de zinc (ZnO) y sulfato de zinc (ZnSO₄). Las ratas (n=3) de cada grupo fueron alimentadas con harina de trigo fortificada durante dos meses. Se registraron biomarcadores hepáticos, como la fosfatasa alcalina (FA), la alanina transaminasa (ALT), la aspartato aminotransferasa (AST) y la bilirrubina, a partir de muestras de suero. El aumento de la concentración de ZnSO₄ afectó a los biomarcadores hepáticos, alcanzando los niveles más altos, mientras que los niveles de bilirrubina fueron menores que en las ratas alimentadas con la dieta control. Los fortificantes mencionados tienen un efecto insignificante sobre los biomarcadores renales, como la creatinina y la urea. Además, se revisaron los parámetros hematológicos y, según se informó, las ratas alimentadas con EDTA de hierro y sodio presentaron los mayores niveles de hemoglobina, hierro y capacidad total de fijación del hierro. El mayor nivel de zinc se observó en las ratas alimentadas con harina de trigo integral fortificada con 60 mg/kg de óxido de zinc. La observación microscópica del tejido hepático mostró que las ratas alimentadas con harina de trigo fortificada con hierro y zinc presentan mayores efectos tóxicos, mientras que la presentación histopatológica del tejido renal tiene un impacto menor. Se concluyó que la fortificación obligatoria de la harina de trigo con hierro y zinc puede causar un aumento de los biomarcadores séricos, junto con toxicidad en órganos vitales como el hígado; por lo tanto, se podría fortificar una fracción de la harina de trigo para satisfacer las necesidades de los grupos desfavorecidos y vulnerables.